Se dice que una indiecita al lado de rio Guadalajara, cuando estaba lavando la ropa la corriente arrastraba un pequeño crucifijo, y ella lo tomo entre sus manos y se lo llevo a su chocita, por la noche empezó a oír ruidos extraños era porque él estaba creciendo, ella lo llevo a la iglesia .
La gente empezó a venerar esta imagen y empezó el turismo a atrayendo otros creyentes de Colombia.
La gente va a visitar y a conocer está imagen en Buga-Valle por ser tan milagroso, van conocer está imagen y su templo donde se encuentra.
En la iglesia hay un santuario dedicado a adorar a esta imagen iluminada y rodeada por unos angelitos de color azul claro.
Unos de los atractivos también es el mangar blanco que ellos venden y sus artesanías.
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